Ese Para Qué los llevaba a atravesar sus limites, sus miedos, a tomar riesgos a pesar de fracasar una y otra vez. Porque cuando encuentras lo que te apasiona nada te detiene, cuando tu meta es mas grande que tu, no te rindes!
Mi mayor aprendizaje en la vida ha sido adueñarme de mis resultados. Soy tan protagonista de mi vida cuando las cosas salen bien como cuando no. Esto me llevo a apreciar mis fracasos.
Si leíste bien, a apreciarlos y aprender de ellos para saber que debo corregir. Aprender esto me regreso un poder personal sobre mi misma que me devolvió libertad y sobre todo perseverancia para no desistir cuando fracaso.
Emprendí por primera vez a mis 25 años, hice algunas cosas bien pero la mayoría mal. Perdí mis ahorros, caí en deudas, me sentí sola y totalmente fracasada. Derrotada, sintiéndome incapaz decidí buscar otro camino para generar ingresos.
Aprendí lo importante de ser humilde, aceptar mis errores y aprender de ellos para reinventarme, y bueno…. en menos de 1 año pasé de estar hasta la zapatilla en deudas a pagar todas y cada una de ellas.
De tener lo juuusto para la gasolina y la comida a comprarme mi primera propiedad, el carro que me gustaba, viajar donde quería… pero sobre todas estas cosas que logre; logré conectarme con mi ser abundante en el mundo.
Empecé a ver el mundo diferente, a ver los fracasos como aprendizaje, el desafío se volvió emocionante, Empecé a relacionarme con el dinero de otra manera, con las personas, pero sobre todo conmigo misma, hice las paces conmigo y resinifiqué mi historia.
En mi búsqueda por compartir lo que aprendí, contribuir y guiar a otros descubrí el coaching y encontré mi camino. Encontré un vehículo que me devuelve plenitud. Me dije….Si algo te hace feliz y agrega valor en otros entonces por ahí es.